Una de las mayores críticas que enfrentan los certámenes de belleza es la cada vez más frecuente tendencia de las participantes a perfeccionar quirúrgicamente su anatomía.
Y es que, aunque para algunos es válido que las chicas echen mano de la ciencia para corregir algunas zonas de sus cuerpos, hay quienes señalan a esas prácticas como incongruentes con la naturaleza de los propios concursos.
Sin embargo, al menos la organización Miss Universo no pone objeciones en cuanto a las cirugías estéticas, como consta en su sitio de Internet.
"Si bien se les sugiere a las delegadas que no alteren su belleza natural, no hay restricciones en cuanto a las operaciones.
Es imposible establecer reglas al respecto.
"De hecho, desde 1990, la organización permite la utilización de rellenos, en un esfuerzo por desalentar la alteración permanente de los cuerpos de las chicas para la competencia", se lee en el site www.missuniverse.com.
Ante la ausencia de prohibiciones, prácticamente todas las jóvenes que este año se disputan la corona en Bahamas se han sometido a uno o más "arreglos", casi siempre en el busto o lo nariz.
Pese a ello, son chicas que tienen una "belleza base", una estructura que permite ciertas cirugías a manera de perfeccionamiento, señala el doctor Gustavo González, miembro de la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica y Reconstructiva.
"Hay gente que, aunque se haga lo que se haga, nunca podrá aspirar a estar en un concurso o en una pasarela", asevera el cirujano, quien ha tomado diversos cursos de especialización en Brasil y Estados Unidos.
En contraparte, el diseñador Ángel Sánchez, encargado por muchos años de vestir a las Miss Venezuela, considera que el bisturí resta naturalidad a las concursantes.
"Prefiero la belleza esculpida con ejercicios y entrenamiento. Los senos operados se ven así, operados, y muchas veces hasta vulgares. Se nota un cuerpo ficticio, y la ropa nunca se ve elegante.
"Puedo entender una pequeña corrección de nariz, pero esos senos 'perfectos' los tienen sólo aquellas que los pueden pagar", asevera en entrevista el creador.
Pero el doctor González, seguidor de concursos de belleza desde hace varios años, insiste en que las cirugías pueden resultar benéficas para las participantes, como en el caso de Karla Carrillo, la representante de México.
"Ha mejorado bastante: bajó 14 kilos y se arregló el busto. Además, con un buen tratamiento de ortodoncia logró una sonrisa perfecta", señala. "Creo que pasó de ser una niña bonita a una mujer hermosa por la seguridad que les da Lupita Jones (directora de Nuestra Belleza México) durante un año de cursos intensivos".
El especialista acepta, sin embargo, que la tapatía tiene algunos puntos débiles, como su tórax demasiado ancho, el cual a veces la hace lucir robusta con ciertas prendas.
"Sólo tiene que checar qué vestidos se pone para acentuar su cintura y lucir bien", afirma el médico.
Finalmente, el cirujano asegura que en estos concursos, al ser la belleza un asunto subjetivo, nunca gana la chica "perfecta".
"Se valora una serie de elementos físicos, pero también de personalidad. Asimismo, cuenta un poco el factor suerte, y un no sé qué que puede hacer la gran diferencia".
Belleza más allá del quirófano
El doctor Gustavo González calcula que el 70 por ciento de las concursantes de Miss Universo 2009 están operadas, al menos del busto.
"No se mueven de manera natural, y la forma en como resaltan del cuerpo es típica de los senos operados".
En el caso de las aspirantes orientales, destaca que recurren al bisturí para adaptar sus rasgos a estándares más occidentales, como los ojos más abiertos.
Karla Carrillo, Miss México
En su opinión, a Karla Carrillo le pusieron un poco "de más" en el busto, lo que contribuye a que se vea un poco ancha de la parte superior del cuerpo.
Hoang Yen Vo, Miss Vietnam
Su rostro delata cirugías y utiliza pupilentes. Tiene poca cintura, tórax ancho y poco busto. No obstante, saca provecho a su poses de modelo ya que esa es su profesión.
Mayra Matos, Miss Puerto Rico
Aunque posee un cuerpo trabajado en gimnasio, por estructura ósea su cadera es un poco ancha. Visualmente da la impresión de que sus piernas son delgadas y con poca pantorrilla.
Estíbaliz Rabade, Miss España
Casi no tiene busto. Es un claro ejemplo de que si le hubieran puesto una copa B, luciría mejor: más armónica y más sensual, con lo que sus posibilidades de ganar aumentarían.
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